Haiman El Troudi Douwara: Los primeros cargadores eléctricos en México

La compañía Tesla ha instalado unas estaciones de súper cargadores en la ciudad de Morelos, México, para vehículos eléctricos e impulsar las importaciones el próximo año.

Tesla en Latinoamérica

La casa automotriz Tesla creó un corredor entre Ciudad de México y Cuernavaca que posiblemente alcance al Puerto de Acapulco en el que instaló unos súpercargadores para lograr la circulación de estos vehículos eléctricos. Esta es una de las primeras instalaciones que se realizarán para lograr la venta y apertura de esta casa comercial en el próximo año.

Tesla está considerado como uno de los mejores vehículos eléctricos del mercado aunque sus costos sean considerablemente altos. Los gobiernos están otorgando subsidios a los conductores e incentivos tributarios para la importación y comercialización en el país de ecomoviles.

Otra alternativa es importar vehículos de este tipo que sean más asequibles a la economía del consumidor. El gran reto común es que más personas adquieran este vehículo, el cual representa una buena inversión desde todo punto de vista.

Imagen cortesía de Informador

Las fuentes de energía para cargar estos vehículos es hidroeléctrica, cuya administración y distribución es de carácter público. Existen países con planes de separar la facturación de las cargas del ecomovil de la generada por el gasto eléctrico en la vivienda donde esté instalado el cargador casero.

México rueda con Taiwán

Taiwán ofreció asesorar y brindar tecnología que ayude a enfrentar la crisis climática que tanto aquejan al país mejicano. La asesoría se enfocaría en la utilización de celdas solares para el uso de esta energía natural y reciclaje del agua que es un problema aqueja a esté país desde hace mucho tiempo.

Esta iniciativa abrirá las posibilidades de mercado a la empresa taiwanesa Luxgen e importará estos ecomóviles en todos los modelos para cubrir las necesidades del conductor.

Imagen corteís de La Nación

Otra posibilidad es insertar autobuses eléctricos adquiridos por las compañías de transporte público para incentivar la compra de estos vehículos y lograr una mayor circulación en el tráfico citadino.

La constitución del motor no permite ir más de 100km/h en algunos modelos, un vehículo perfecto para circular en la ciudad donde se genera la mayor congestión vial y polución contaminante.